DERECHA Y GOBIERNO CONSOLIDAN "LGE"

DERECHA Y GOBIERNO CONSOLIDAN
"LGE DEL MAL" DE LA EDUCACION CHILENA

Recurriendo a artimañas legislativas y acuerdos políticos, finalmente el gobierno y la derecha lograron lo que perseguían, al menos en la Cámara de Diputados, dar este jueves el visto bueno a la tramitación legislativa de la nueva Ley General de Educación (LGE), pese a la cerrada oposición de los profesores en paro y de estudiantes secundarios y universitarios movilizados.
Para lograr su objetivo la Concertación se alineó con el gobierno, sumando 43 votos a los 53 que ya había asegurado la Alianza para aprobar el proyecto de Ley General de Educación (LGE) - que deroga la Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza (Loce)- con 96 votos a favor, 12 en contra y 7 abstenciones.
Para asegurar el apoyo de la derecha el gobierno tuvo que consensuar una indicación que asegurara la naturaleza mixta (pública y privada) del sistema de Educación, la cual generó el rechazo de parte de la Concertación . Sin embargo los ministros del área política salvaron el impasse mediante un viejo truco: la promesa presidencial de impulsar la educación pública con un marco legal y de financiamiento. La Presi firmó hoy jueves en La Moneda, ante los jefes de partidos de la Concerta y las bancadas del oficialismo, el protocolo de su promesa con el cual dejó tranquilos con su conciencia a los diputados disidentes que se fueron a Valparaíso a votar favorablemente la LEGE.
Tras aprobar en general la nueva ley , la Cámara aprobó también - por 85 votos a favor, 9 en contra y 10 abstensiones – la indicación que dice que "es deber del Estado que los establecimientos educacionales pertenecientes o dirigidos por sus órganos se organicen y funcionen conforme al carácter público de tales instituciones y tengan la obligación de proveer una educación pública de calidad, pluralista y que promueva la integración social, dando además cumplimiento a los otros principios contemplados en la Constitución y tratados internacionales ratificados por Chile y las leyes".
La ministra de Educación, Mónica Jiménez, alborozada por el resultado de la votación, declaró hallarse “Así como el padre Hurtado, estoy contenta, señor contento”, porque el futuro de los sostenedores a partir de ahora quedará asegurado y recontraremachado por el acuerdo con la derecha.
Sin embargo, hay todavía una rendija de esperanza porque el proyecto necesita la aprobación de ambas cámaras y aunque aprobado preliminarmente por los diputados, falta que el Senado manifieste su opinión. La resistencia de legisladores de la Concertación junto a independientes abre dudas todavía respecto del destino final de la iniciativa.

Los profesores dejarán el paro y vuelven este viernes a clases, pero convocados para la próxima semana a una Asamblea nacional que definirá el rumbo a seguir, dijo el presidente nacional del magisterio, Jaime Guajardo.